El masaje Kagayaki es una combinación única de los masajes Rukako, Korugi y Kobido, gracias a la cual afecta más profundamente no sólo a los músculos, sino también a los huesos de la cara. Durante el Kagayaki actuamos sobre los músculos y ejercemos presión sobre los huesos de la cara, empujándolos en la dirección que queremos que se muevan.
El Kagayaki mejora la microcirculación estimulando los huesos, los vasos sanguíneos y los ganglios linfáticos. Entre los huesos se acumulan los productos de desecho y los huesos del cráneo se dilatan. Con el masaje Kagayaki, los productos de desecho se eliminan y los ganglios linfáticos vuelven a la normalidad. La hinchazón que se produce debido a los trastornos microcirculatorios desaparece.